Los agricultores de las Marismas tienen que soportar los continuos robos que se producen en aquella zona. Hoy hemos estado visitando el lugar donde antes de ayer robaron en varios barracones llevándose gasoil y herramientas. Desde el mes de diciembre la oleada de robos no ha parado.
Nos dicen que la situación no es normal y que se deberían poner cámaras de seguridad en las entradas que tiene las marismas.